ACTIVIDAD 1.1

Universidad Nacional Autónoma de México ::: Coordinación de Universidad Abierta y Educación a Distancia

Módulo VI. Recursos de información y comunicación para la educación a distancia

DOCUMENTO DE TRABAJO
Grupo C

Responsable de equipo: Hugo Cruz
Integrantes: Claudia Itzel Figueroa Vite, Hugo Cruz

Justificación de recursos de información para una estrategia didáctica

En la actualidad la educación nos plantea un reto enorme, dado que las instituciones educativas, así como el mismo proceso de enseñanza-aprendizaje, se han ido complejizando. Al mismo tiempo que se han hecho cada vez más evidentes las necesidades de información confiable y precisas de las/los educandos, sobre diversos temas.

Cada día se hace más palpable, la necesidad de elevar la preparación del personal docente para satisfacer las demandas que la sociedad impone. En este sentido, se requiere no solo, de su dirección en el proceso de formación de niños/as, adolescentes y jóvenes, sino además la acción dirigida a coadyuvar a la transformación de prácticas y procesos educativos. Díaz Barriga nos dice: “La función del docente consiste en orientar y guiar la actividad mental constructiva de sus alumnos, a quienes proporcionará una ayuda pedagógica ajustada a su competencia”. Para ello el/la docenete tendrá que valerse de herramientas informáticas dentro de su contexto cultural, con las que tal vez no este familiarizado/a.

De acuerdo con Jason Frand (2006): "Actualmente la mayoría de los estudiantes que entran a la educación superior son más jóvenes que el microcomputador, y se sienten mejor escribiendo con el teclado que haciéndolo en un cuaderno de espiral, también prefieren leer en la pantalla del computador que hacerlo de papeles que sostienen con sus manos. La conectividad constante, estar en contacto permanente con amigos y familia, en cualquier momento y desde cualquier lugar, es para ellos de la mayor importancia".

La actividad docente se ve replanteada por estas circunstancias históricas y culturales. La UNESCO señala cómo en la actualidad el concepto de alfabetización se ha ampliado y se habla entre otras de la alfabetización en los medios de comunicación electrónicos.

Según la Online Computer Library Center (OCLC):

1. 89% de los estudiantes de educación superior utilizan los motores de búsqueda para comenzar a buscar información, solo el 2% inicia esa misma búsqueda en el sitio web de una biblioteca
2. 93% están o satisfechos o muy satisfechos con la experiencia general de usar motores de búsqueda, situación que contrasta con la satisfacción del 84% respecto de las búsquedas apoyadas por un bibliotecólogo
3. los motores de búsqueda se acomodan mejor al estilo de vida de los estudiantes de educación superior que las bibliotecas físicas o en línea y ese acomodo es “casi perfecto”
4. los estudiantes de educación superior todavía utilizan la biblioteca, pero lo hacen con menor frecuencia, al igual que la lectura de materiales de esta, desde que comienzan a usar herramientas de búsqueda por Internet
5. los “libros” son todavía la primera asociación que hace este grupo con la biblioteca, a pesar de la considerable inversión de esta en recursos digitales; la situación anterior en buena medida la desconocen los estudiantes

El desarrollo de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), especialmente el advenimiento de Internet, han traído como consecuencia pasar de una época en que la información era escasa, costosa y de difícil acceso a otra en la que es abundante, fácil de acceder y en muchísimos casos gratuita, al menos para un porcentaje de la población.

Para las/los docentes de menores recursos (especialmente las que pertenecen a países en desarrollo) esto significa, por una parte, la oportunidad de acceder, a gran cantidad de recursos valiosos antes escasos o inexistentes, tales como bibliotecas, laboratorios, mapotecas, hemerotecas, revistas, etc, que en muchos casos son gratuitos; y por la otra, la necesidad urgente de enseñar a los educandos a encontrar esa información, evaluarla de manera crítica y usarla efectivamente, para que el recurso informático pueda ser transformado en una estrategia didáctica.

La cantidad abrumadora de información disponible sobre diferentes temas impide que esta se concentre o se deposite en una sola persona o que la escuela pueda enseñarlo todo. Por esta razón, el objetivo debe ser ayudar a los estudiantes a desarrollar los conocimientos, habilidades y disposiciones personales (actitudes), así como las estrategias de aprendizaje requeridas para formular preguntas significativas (iniciales y secundarias) sobre un tema de estudio, acceder a diversas fuentes de información que lo atiendan, comprender lo que estas les aportan y seleccionar las más adecuadas. De esta manera, pueden aprender a aprender de manera autónoma e independiente durante el resto de sus vidas.

Por esta razón, para desenvolverse adecuadamente en una cultura llena de fuentes de información, los estudiantes deben desarrollar Competencia para Manejar Información (CMI). Esta se puede definir concretamente como las habilidades, conocimientos y actitudes, que el estudiante debe poner en práctica para identificar lo que necesita saber sobre un tema específico en un momento dado, buscar efectivamente la información que esto requiere, determinar si esta información es pertinente para responder a sus necesidades y convertirla en conocimiento útil, aplicable en diferentes contextos.

En este contexto, considerando la importancia que para el Programa Universitario de Estudios de Género tiene promover el conocimiento de la perspectiva de género y de las herramientas que permitan construir la equidad entre los géneros, es de vital importancia que los destinatarios de los programas de intervención educativa en materia de género, desarrollen la CMI, con el fin de utilizar como ambiente de aprendizaje las TIC. El uso de estos recursos permitirá responder a necesidades educativas detectadas, hasta la fecha, en la modalidad presencial, tales como la carencia de espacios de diálogo permanente docente-grupo e intragrupal.